Prepara un postre para la noche: así haces unas mini donas de azúcar

¿Tienes antojo de algo dulce por la noche? Las mini donas de azúcar son una opción ideal. Pequeñas, suaves y cubiertas con una capa de azúcar que las hace irresistibles, estas delicias son perfectas para acompañar una taza de café, leche o té. A continuación, te mostramos cómo prepararlas en casa, de manera sencilla y rápida, para que puedas disfrutar de un postre ligero y delicioso antes de ir a la cama.

¿Qué hacer para que las mini donas no se pongan duras? 

Una de las preocupaciones comunes al preparar donas es que se pongan duras al enfriarse. Antes de compartirte la receta de estas esponjosas donas, te daremos algunos consejos para mantener tus mini donas suaves y deliciosas. 

• El aceite demasiado caliente puede cocinar las donas demasiado rápido por fuera, dejándolas crudas por dentro. Además, esto hace que pierdan humedad rápidamente, resultando en donas secas y duras. Mantén la temperatura del aceite en el rango adecuado y monitorea con un termómetro si es posible.
• Freír muchas donas a la vez reduce la temperatura del aceite, haciendo que absorban más grasa y se vuelvan pesadas y duras. Fríe en pequeñas tandas para asegurar una cocción pareja y una textura perfecta.
• Si no consumes todas las donas inmediatamente, guárdalas en un recipiente hermético a temperatura ambiente. Colocar una toalla de papel en el fondo del recipiente ayuda a absorber el exceso de humedad y grasa, manteniéndose frescas por más tiempo.

Mini donas de azúcar

Ingredientes:

• 1 taza de harina de trigo
• 1/4 de taza de azúcar
• 1 cucharadita de polvo para hornear
• 1/4 de cucharadita de sal
• 1/2 taza de leche
• 1 huevo
• 1 cucharada de mantequilla derretida
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• Aceite vegetal para freír
• Azúcar granulada para cubrir

Preparación:

1. En un tazón grande, mezcla la harina, el azúcar, el polvo para hornear y la sal. Esta combinación será la base de tus mini donas, asegurando que queden esponjosas y ligeras.
2. En otro tazón, bate el huevo y añade la leche, la mantequilla derretida y la esencia de vainilla. Mezcla bien hasta obtener una preparación homogénea. Vierte esta mezcla sobre los ingredientes secos y remueve con una espátula o batidor de mano hasta que no queden grumos. La masa debe quedar suave, pero no líquida.
3. Coloca una sartén profunda o una cacerola con suficiente aceite para freír a fuego medio-alto. El aceite debe alcanzar una temperatura de aproximadamente 180°C. Para asegurarte de que está listo, puedes sumergir un pequeño trozo de masa en el aceite; si burbujea y sube a la superficie rápidamente, el aceite está en su punto.
4. Con ayuda de una manga pastelera o una bolsa de plástico con una esquina cortada, forma pequeñas roscas directamente en el aceite caliente. No hagas las donas demasiado grandes para que se cocinen uniformemente. Fríelas durante 2 a 3 minutos por cada lado o hasta que estén doradas.
5. Retira las donas del aceite con una espumadera y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de grasa. Mientras aún estén calientes, pásalas por un plato con azúcar granulada, asegurando que queden bien cubiertas.