Uno de los mitos más populares de la repostería es que necesitas forzosamente una báscula para llevarla a cabo, y aunque es cierto que algunos procesos requieren precisión, la realidad es que puedes elaborar deliciosos postres sin tener este utensilio en la cocina. La prueba de ello es este bizcocho esponjoso y muy rico que se prepara utilizando una taza como unidad de medida para la mayoría de los ingredientes. Aprende a hacerlo así.
Los únicos ingredientes que no se miden con una taza son los huevos, que se miden por piezas, y el polvo para hornear, ya que al utilizarse una cantidad mucho más pequeña que una taza, necesitaremos de una cuchara sopera para medirla. Una vez que tengas listo este bizcocho, podrás disfrutarlo de forma directa acompañado de una taza de café, o incluso podrás elaborar ricos pasteles utilizando el bizcocho como base.
Ten en cuenta que para medir correctamente los ingredientes deberás utilizar la misma taza con cada elemento. De esta manera, puedes mantener un estándar en las cantidades y lograrás la textura esponjosa y correcta en el bizcocho. Si llegas a utilizar diferentes tazas para medir los elementos de la receta, corres el riesgo de alterar las proporciones y que tu pan quede demasiado húmedo, aguado, reseco o incluso duro.