Bizcocho: ¿Cuál es el origen de este pan y cómo llegó a México? Descubre su historia

Actualmente, México tiene una gran tradición en repostería, y nuestro país cuenta con una rica gastronomía dulce que se remonta cientos de años atrás. Entre la amplia gama de postres que podemos encontrar en la cocina mexicana, existe una gran variedad de pasteles y, sobre todo, de bizcochos, que son una de las bases de la repostería mexicana. Pero, ¿cómo llegaron estos postres al país? Aquí te lo explicamos.

¿De donde vienen los bizcochos? El origen del postre

Originalmente, la palabra "bizcocho" proviene de "biscotus" en latín, que significa "cocido dos veces", ya que esta era la técnica romana para preparar una especie de torta o pan seco. Después, los franceses adoptaron la palabra "biscuit" para nombrar un tipo específico de galleta, y finalmente la palabra se transformó en el español a lo que actualmente conocemos como "bizcocho", usada para denominar las esponjas y panes esponjosos.

¿Cómo llegaron esponjas y bizcochos a México?

En el México prehispánico, ya se elaboraban muchas preparaciones dulces que sorprendieron a los españoles con su llegada. Sin embargo, después de la conquista y durante la época del virreinato, México desarrolló una fuerte cocina dulce y una gran tradición panadera. Así, varias preparaciones europeas encontraron su lugar en la cocina mexicana, donde nacieron nuevas versiones de los clásicos de la repostería con el toque y el sabor mexicano.

Aunque ya se elaboraban tortas y pasteles en México, no fue hasta el Porfiriato, con la ola de cultura francesa que adoptó la sociedad mexicana, que los bizcochos y las preparaciones de repostería clásica tuvieron un auge dentro de la gastronomía nacional. Fue así como los bizcochos tradicionales empezaron a hacerse un hueco cada vez mayor en las familias de México.

Con el paso del tiempo, la cocina mexicana fue adaptando las enseñanzas francesas y la mezcla de sabores del virreinato en su propia gastronomía. Y aunque los bizcochos comenzaron siendo algo de las grandes pastelerías, poco a poco todas las familias mexicanas comenzaron a darles un lugar en su mesa. Así se creó una enorme tradición pastelera en México.

Ahora, no hay cumpleaños en el país que no se celebre con un delicioso pastel hecho con un esponjoso bizcocho. Pastelerías y panaderías elaboran toda clase de esponjas y panes como las bases de pasteles y otras preparaciones, y así el bizcocho en México se ha convertido en una de las bases de la repostería.