Enero ya está mostrando lo rudo del invierno y la verdad es que aunque muchos ya nos acostumbramos a la comida cálida, como los bizcochos, galletas y todo tipo de bebidas calientes. Pero hoy, aprovechando que ya el clima ha cedido un poco y la temperatura ha subido ligeramente, pues queremos compartirte una receta diferente.
Nos referimos al paso a paso que puedes seguir para hacer una deliciosa natilla de vainilla, que además de espantarte el hambre, puede ponerte de muy buen humor dado el gran sabor de esta internacional especia aromática y culinaria, que le ha dado un gran sabor a cientos de pasteles, gelatinas y todo tipo de postres.
Las natillas son un postre típico español bastante popular, que de acuerdo con algunos documentos tuvo su origen en la época medieval, en los conventos españoles y franceses, donde los frailes mezclaron harina de trigo, huevo y azúcar, que terminó como este postre. Sin embargo, hay otras versiones que dicen que podría haber empezado en la República Romana, se habría perfeccionado con la repostería francesa y de ahí sobrevivió hasta nuestros tiempos.
¿Con qué puedes acompañar la natilla?
Pero haya surgido donde haya surgido, la verdad es que pocos placeres se comparan como el de disfrutar una tras otra cucharada de natilla de vainilla bien preparada, especialmente cuando la combinas con galletas tipo barquillo de helado o incluso sola. Es un postre rico en proteínas y carbohidratos.
Hoy día puedes hacer incluso natillas sin azúcar, pero este no es el día, así que te diremos cómo es que puedes hacer una natilla de vainilla al estilo catalán.