Cheesecake con crema de avellana, prueba la cremosa combinación en este pay

Cada 5 de febrero se celebra el Día Mundial de la Crema de Avellana, este ingrediente delicioso lleno de sabor y una textura cremosa que se puede aprovechar en miles de recetas para darle ese toque único a tus postres, justo como este cheesecake con crema de avellanas que te enseñaremos a preparar hoy, lo mejor de todo es que no necesitarás horno para hacerlo, solo deberás usar tú refrigerador y un poco de paciencia. 

Para esta receta haremos un clásico cheesecake con grenetina, que aprovecha el poder gelificante de este ingrediente para crear una textura cremosa y deliciosa, además también utilizaremos crema de avellana, en este caso puedes usar tu marca favorita o hacer la propia en casa, si quieres una versión fácil de este ingrediente, en este enlace te dejaremos una receta muy rica. 

Cheesecake con crema de avellana

Ingredientes

• 2 tazas de Galletas de chocolate
• 90 gramos de Mantequilla
• 7 gramos de Grenetina
• 35 gramos de Agua fría
• 200 gramos de Queso crema
• 200 gramos de Media crema
• 300 gramos de Leche condensada
• Esencia de vainilla
• 100 gramos de Crema de avellana

Lo primero que deberás hacer será preparar la base de tu cheesecake, para ello tritura las galletas de chocolate y derrite la mantequilla, una vez que tengas una mezcla arenosa de galletas agrega la mantequilla derretida y forma una pasta que deberás presionar en el fondo de un molde para pay y así formar la costra de tu cheesecake, por otro lado hidrata la grenetina agregándola al agua fría y dejando que esponje. 

Bate el queso crema hasta lograr una textura esponjosa y después integra la media crema, la leche condensada y la esencia de vainilla, por otro lado derrite en tu microondas la grenetina y agrega en forma de hilo a tu crema de queso, separa una tercera parte que deberás mezclar con la crema de avellana y cuando tengas una crema uniforme vierte la parte de queso en tu molde para pay, después vierte por encima la parte de crema de avellana y revuelve ligeramente con ayuda de un palillo, lleva refrigerar hasta que esté listo y disfruta.