Los suspiros son pequeños merengues crujientes por fuera y suaves por dentro que puedes preparar en casa fácilmente con muy pocos ingredientes y lo mejor de todo es que resultan un postre bastante versátil que puedes combinar con muchos otros ingredientes para crear versiones deliciosas, como esta que te presentamos hoy, unos suspiros de coco que tienen ese toque crujiente especial que da la pulpa de esta fruta. ¿Quieres aprender a prepararlos? Aquí le decimos cómo.
En esta ocasión el coco que debes utilizar debe de ser la pulpa de la fruta seca y rallada, para tener un sabor balanceado dentro de tus suspiros es necesario que evites las versiones tostadas o con azúcar, ya que estas versiones de coco rallado pueden alterar tanto la textura como el sabor del postre final. Ten en cuenta que este postre es muy fácil, pero es un poco tardado de hacer gracias al horneado, así que hazlo con anticipación.
La base de estos suspiros es un merengue sencillo que haremos a partir de claras de huevo y azúcar glass, es muy importante que las claras de huevo no contengan ningún rastro de yema para que puedas levantarlas fácilmente y además deberás tamizar muy bien el azúcar glas para evitar cualquier grumo que se pueda formar en la masa, si quieres hacer este ingrediente de forma casera, aquí te dejamos una guía para hacerlo.
