Natilla fría de vainilla, un sencillo y refrescante postre perfecto para el desayuno

Comenzar el día con algo dulce y refrescante es tan fácil cómo preparar esta deliciosa natilla de vainilla fría, un postre muy sencillo de elaborar que no te llevará más de unos minutos hacerlo, lo mejor de todo es que necesitas muy pocos ingredientes para llevarlo a cabo, así que no te preocupes por procesos complejos o ingredientes difíciles de conseguir. 

Para lograr la consistencia perfecta usaremos fécula de maíz, que nos ayudará a espesar nuestra leche, también agregaremos esencia de vainilla como sabor principal de nuestro postre, pero si tienes a la mano una vaina de vainilla natural, que puedas integrar a la leche, será mucho mejor pues el sabor que este alimento otorga es más intenso y aromático que el que puedes conseguir de la esencia, dándote un postre bastante delicioso. 

Natilla fría de vainilla

Ingredientes

• 2 tazas de Leche
• 1 rama de Canela
• 1/2 taza de Azúcar
• Esencia de vainilla
• 2 cucharadas de Fécula de maíz
• 1/2 taza de Agua

Comienza colocando tu leche en una olla pequeña junto con el azúcar, la vainilla y la canela, lleva a fuego medio y calienta hasta que todos los ingredientes se integren, no es necesario que la leche hierva solo necesitamos que el calor ayude a disolver el azúcar y haga que la canela se infusione, aquí también puedes agregar tus condimentos favoritos para darle un toque especial a la receta, así puedes usar anís, romero o incluso piel de limón. 

Mientras tu leche se calienta deberás tomar el agua y agregar la fécula de maíz, integra muy bien estos ingredientes hasta lograr un líquido uniforme que tendrás que verter sobre tu leche; al momento de hacerlo deberás bajar el fuego y cocinar todo sin dejar de mover, la mezcla se ira espesando y cuando tenga una consistencia densa parecida a la del atole deberás retirar del fuego y dejar enfriar, puedes servir en copas y una vez a temperatura ambiente lleva al refrigerador por unos minutos para enfriar completamente.