Leche Frita baja en calorías, así puedes disfrutar de está deliciosa versión sin preocuparte

Algo por lo que nos encanta llegar a Semana Santa, no solo es por el tema de tener una parte de vacaciones, también porque es la temporada en la que muchos de los postres que durante el año no solemos cocinar, esta es la temporada perfecta para hacerlo y disfrutarlos en grandes cantidades. Incluso hay muchos, que si no somos tan amantes de recrearlos, se van a vender en grandes cantidades y los podremos disfrutar. 

Precisamente, uno de esos postres, resulta ser la leche frita, el cual es uno de los dulce más populares del año, a lado de las torrijas, los buñuelos o los pestiños. Ahora, la leche frita como tal, resultan ser un dulce típico de los famosos Carnavales y se caracteriza por su sencilla elaboración con algunos ingredientes, que básicamente podemos encontrar la mayoría en casa y que no necesitarías gastar demasiado. 

Aunque su origen no está muy claro, se ha convertido, sin duda, en uno de los favoritos y, aunque su receta original es bastante buena, la realidad es que puede ser un tanto alta en calorías o imposible de consumir para las personas que son intolerantes al gluten. Por ello, el día de hoy te traemos una opción mucho más saludables y a base de leche vegetal, la cual no le pedirá NADA a la original. 

Leche frita

Ingredientes

• 600 ml de leche vegetal
• 60 g fécula de maíz
• 1 cdita de edulcorante líquido o 4 cdas en polvo
• 1 rama de canela
• 3 tiras de cáscara de limón
• Para rebozar
• 1/1 tza de avena molida
• 1huevo

Para decorar

• 2-3 cdas de edulcorante y canela.

Preparación

1. En un bowl pondremos la fécula de maíz y una parte de la leche. Mezclamos perfectamente hasta que no queden grumos.
2. En una olla pondremos el resto de la leche con canela, las cáscaras de limón  y edulcorante.
3. Remueve constantemente y dejamos por 8-10 minutos, sin llegar al hervor.
4. Pasado el tiempo y cuando sientas que está perfecta, retiramos la canela y las tiras de limón.
5. Dejaremos al fuego y añadimos la mezcla previa de harina.
6. Con ayuda de una una papita globo removemos perfecto.
7. Deberá quedarte con una consistencia suave.
8. Colocaremos en un molde de vidrio o silicona. Esparcimos perfectamente.
9. Llevamos al refrigerador por unas 4-5 horas o toda la noche hasta cuajar.
10. Pasado el tiempo, lo sacamos y lo siguiente que haremos será pasar a rebosar en harina de avena y huevo.
11. Colocamos en un sartén previamente caliente y dejamos freír por ambos lados.
12. Cuando lo tengamos, pasamos por azúcar con canela.
13. Y listo, disfruta.