Receta fácil para preparar unas deliciosas torrijas tradicionales en Cuaresma

Las torrijas son uno de los postres más tradicionales de la Cuaresma, por lo que no te puedes perder esta receta fácil para prepararlas y disfrutarlas en casa durante estas fechas. También conocidas como tostadas francesas, este platillo tiene su origen hace miles de años, pues una primer referencia aparece hacia el siglo IV y V, cuando se menciona un preparación similar.

Se trataba de pan sumergido en leche, aunque la receta de las torrijas incorpora tradicionalmente huevo. Las torrijas comenzaron a ser endulzadas en la Europa medieval y ahí se les otorgaron varios nombres, incluyendo algunos con el término soup o suppe, como una sopa. Sin embargo, el término torrija proviene de un villancico español que mencionaba un platillo para las parturientas.

Las torrijas suelen ser comunes en los desayunos, pero en estas fechas también es muy común que se disfruten como un postre, e incluso, como herencia de los españoles, en México tenemos la capirotada, un postre con base en esta preparación, aunque adiciona otros ingredientes y también prescinde de los huevos, una delicia que por tradición y simbolismo se elabora en Cuaresma.

Torrijas

Ingredientes:

• 1 baguette
• 600 mL de leche de vaca
• 3 huevos
• 2 ramas de canela
• 100 gramos de azúcar
• 1/2 limón, cáscara
• Canela en polvo
• Azúcar
• Aceite de oliva virgen

Sirve en una olla la leche de vaca con las ramitas de canela, la cáscara de medio limón y el azúcar, deja a fuego medio alto y revuelve regularmente para deshacer el dulce.

Mientras se calienta la leche, corta la baguette en rebanadas de unos 2 centímetros de ancho, asegúrate de que el pan esté firme, por ello se prefiere pan duro o del día anterior, para que así no se remoje tan fácil.

Cuando la leche comience a hervir, retira del fuego y espera a que se enfríe a temperatura ambiente, puedes servirla en un bowl para que después sea más fácil de hacer el proceso de las torrijas.

Sirve en otro tazón los huevos y bátelos, déjalos a mano.

Coloca un sartén amplio a fuego alto con bastante aceite de oliva virgen, cuando esté caliente pasa el pan cortado por el bowl de la leche y luego por el del huevo, colócalas con cuidado en el sartén para que no te salpique.

En cuanto se vayan dorando, voltea y según estén listas, retíralas del fuego, pásalas a un plato con papel absorbente. Repite hasta terminar el pan.

Sirve las torrijas, aplástalas con la espátula (una tradición al servirse) y espolvorea con azúcar o canela en polvo, según tu gusto, ¡y a disfrutar de este rico postre de Cuaresma!