Postres para el otoño

Buñuelos de viento espolvoreados, la receta tradicional para el otoño

Estos postres son irresistibles. Una vez que llega diciembre, no podemos dejar de saborear estas especialidades que nos evocan a los sabores que nos heredaron los conventos del siglo XVI
sábado, 26 de noviembre de 2022 · 21:00

Los buñuelos pueden ser sinónimo de rico, ya que su sabor y consistencia son irresistibles para todos aquellos que los prueban. Se trata de unas especialidades que se comenzaron hacer en México en los conventos de la época del Virreinato y que en la actualidad siguen siendo muy apreciadas en otoño.

La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sader) sostiene en sus registros que: El origen de los buñuelos data de hace unos dos mil años en países como Turquía, Marruecos o Egipto, donde se comían bolitas hechas de masa frita con miel. Esta combinación emigró a España y se transformó en los buñuelos de viento. Gracias al intercambio cultural que existió durante la conquista, fue que este tipo de preparación llegó a México”.

En la actualidad, los buñuelos se hacen en la época decembrina, pero se pueden encontrar a lo largo del año en las ferias regionales, los cuales siempre son acompañados con su porción de rica miel.

Buñuelos de viento

Ingredientes:

  • 6 cáscaras de tomate verde.
  • 1 chorrito de anís.
  • 1 kilo de harina.
  • 3 huevos.

  • 1 cucharadita de polvo para hornear.
  • 1 cucharada de manteca.
  • Aceite comestible, cantidad necesaria.

Miel:

  • 1 cono de piloncillo
  • Agua, cantidad necesaria.
  • 1 rajita de canela.
  • 3 tejocotes (cáscara).

 

Procedimiento:

Hervir las cáscaras de tomate con el anís en un poco de agua, retirar y colar. Verter la harina en una superficie plana. Formar una fuente y poner en medio todos los ingredientes menos el agua, la cual se tiene que ir añadiendo poco a poco, de acuerdo a como va amasando la harina. Seguir amasando hasta obtener una consistencia homogénea y que esta se desprenda fácilmente de dónde la está trabajando. Dejar reposar una hora, antes de hacer los buñuelos, formar bolitas y estirar con la mano hasta formar los buñuelos. Freír en suficiente aceite caliente. Retirar, dejar enfriar y servir con miel.

Miel:

Hervir el piloncillo en agua con anís, la canela, la cáscara del tejocote, mantener hasta espesar. Retirar, colar y dejar enfriar.

Receta de El Libro Clásico de la Navidad en México, de Sebastián Vertí.