El cheesecake de calabaza se trata de una tarta de queso de lo más clásico y a la vez de lo más original, ya que en muy pocos lugares su usa la calabaza de Castilla para elaborar postres. En términos de sabor y textura es lo más, ya que el resultado es súper cremoso y a la vez un postre de culto ideal para estas fechas.
Ingredientes:
Para el relleno:
- 200 g de puré de calabaza
- 200 g de queso crema
- 100 g de yogur
- 60 g de azúcar
- 100 ml de crema
- 2 huevos
- 20 g de harina
- 1 cucharada de jugo de limón.
Para la base de la tarta:
- 100 g de galleta
- 50 g mantequilla derretida
Para la crema batida:
- 100 g de queso crema
- 100 ml crema fresca.
- Cantidad suficiente de azúcar
Elaboración:
1)Precalentar el horno a 170 grados. Tamizar la harina.
2)Hacer el fondo de la tarta: colocar las galletas en una bolsa de cierre hermético y triturarlas finamente con un rodillo. Agregar la mantequilla derretida y mezclar bien. Cubrir el fondo del molde con una bandeja para hornear y enfriar en el refrigerador durante 30 minutos para que se endurezca.
3)Hacer el relleno. Cortar la calabaza en trozos pequeños, colocarla en un recipiente, y cubrirla sin apretar con papel film. Calentarla en el horno microondas a 600 W durante cinco minutos. Retirar la envoltura de plástico y enfriar.
4)Poner el puré de calabaza, el queso crema, el yogur y el azúcar en una batidora y mezclar hasta que quede suave.
5)Agregar los huevos, la harina para pasteles y el jugo de limón y mezclar, luego agregar la crema fresca y mezclar más.
6)Verter en el molde y hornear en el horno durante 45 minutos.
7)Después de hornear, retirar del fuego y enfriar en el refrigerador durante la noche.
8)Hacer crema batida, colocar la crema y el queso en un tazón y batir hasta montar.
9)Retirar la tarta del molde y extender la crema batida sobre su superficie, espolvorear con azúcar y quema con un quemador.