Receta de galletas en forma de corazón, el regalo perfecto para este Día de San Valentín

Si ya te estás preparando para el Día de San Valentín, seguro has pensado en que un detalle hecho por ti misma para tus amigos, tu familia o tu pareja sería algo mucho más emotivo que un recuerdo comprado en cualquier centro comercial. Estamos de acuerdo contigo, porque sin duda, el tiempo, amor y paciencia que requiere elaborar un platillo o un postre es siempre el recuerdo que más atesoramos en nuestra memoria.

Por eso, hoy queremos compartir contigo una receta para hacer unas ricas galletas en forma de corazón para celebrar este Día de San Valentín y te decimos cómo hacerlas con un colorante, rosa o rojo, para que queden ad hoc al día del amor y la amistad. El sabor de estas ricas galletas es de mantequilla, así que una vez que las pruebes no podrás parar de disfrutarlas, y si quieres puedes agregarles una capa de chocolate.

En este caso, sólo tienes que dejar que las galletas se enfríen bien, colocarlas en una rejilla y poner a derretir chocolate en baño María o en el horno de microondas, cuando esté listo sírvelo sobre cada galleta y deja enfriar. Para darle un toque extra, después de ponerle el chocolate puedes añadir unas chispas de color o con forma de corazones, le darás un toque extra y el sabor será realmente delicioso, ¡esperamos que las disfrutes!

Galletas en forma de corazón

Ingredientes:

• 450 gramos de harina de trigo
• 140 gramos de azúcar
• 250 gramos de mantequilla sin sal
• 2 huevos
• Colorante comestible rojo o rosa, opcional

Sirve la mantequilla sin sal a temperatura ambiente en un bowl, agrega el azúcar y bate hasta acremar. Añade uno a uno los huevos, sigue batiendo hasta terminar de incorporar, comenzará a ser difícil manipularla, pero esta es la consistencia correcta.

Sin dejar de batir, agrega poco a poco la harina cernida y un chorrito de colorante comestible (si quieres ponerle un toque de color a tus galletas), hasta obtener una masa homogénea, puedes hacerlo con una batidora eléctrica o con tus manos.

Una vez que tengas una masa moldeable, pártela en dos partes iguales, forma dos bolas, coloca cada una en un bowl y tapa con plástico autoadherible, mete al refrigerador por 1 hora.

Precalienta el horno a 180ºC.

Poco antes de que se cumplan 15 minutos saca la masa. Coloca una bola en una superficie plana y muy limpia, espolvorea un poco de harina arriba y abajo y extiende con un rodillo enharinado, dejando un grosor aproximado de 3 milímetros. Repite con la otra bola de masa.

Prepara una charola para el horno con papel encerado. Corta la masa usando cortador de galletas en forma de corazón o dibuja un corazón en un trozo de papel o cartón y recórtalo, colócalo sobre tu masa y con la punta del cuchillo pasa alrededor para obtener la misma forma en todas.

Pasa cada galleta a la charola que preparaste, dejando un poco de espacio entre cada una. Una vez que termines, mete al horno por aproximadamente 10 minutos o hasta que las orillas comiencen a dorarse.

Deja reposar en una rejilla para que se enfríen y listo, ¡a disfrutar!