¿Cómo hacer la masa de azúcar que enamoró a Don Diego de Castamar?

La Cocinera de Castamar es sin duda una de las mejores promesas de Netflix, que vio la luz en este 2021. Es la historia de algunas vivencias de Clara Belmonte, una joven amante de la cocina que trabaja al servicio del Duque de Castamar, quien no tarda en enamorarse de ella tan pronto prueba algunos de sus deliciosos platillos y postres en los primeros capítulos. Y es que el melodrama que gira en torno a la agorafóbica mujer le ha valido muchos elogios de sus espectadores, porque tiene todos los elementos para mantenernos pendientes de lo que pasa. 

La serie de época está basada en la novela homónima escrita por Fernando J. Múñez y se estrenó en Netflix, la plataforma de streaming más famosa del entretenimiento en febrero de 2021. Está ubicada en la España de 1720, donde la nobleza, el ducado y todo tipo de rango relacionado con el rey todavía tenían gran influencia y poder sobre la vida de la gente. Y es en este contexto, que Clara Belmonte encuentra en la cocina de Don Diego un refugio de su pasado, donde su padre había muerto. 

Y siendo bien honestos, si miras con atención, te aseguramos que Don Diego no es el único que se sorprende y enamora de esos platillos exquisitos, pues su familia antes de saberla una amenaza para el futuro de Castamar, también elogia su portentoso talento en sobremanera. ¿Y cómo no hacerlo? Si uno que está de este lado de la pantalla no podemos sino babear e imaginarnos que las comidas que se sirven en algunos de los capítulos huele y sabe delicioso. 

Masa de azúcar, receta de 'La cocinera de Castamar'

Sin embargo, al puritito estilo 'Ghost', la sombra del amor, hay una escena en particular que marca toda la trama de la serie para siempre y es nada más y nada menos que cuando Don Diego va a la cocina a ver a cocinar a Clara y esta le explica cómo hacer la famosa masa de azúcar, que usará para servir unos postres al día siguiente a sus invitados. Sin duda, este fugaz episodio maravillan al duque y después de eso, no puede sacarla de su mente nunca más.

Los dulcecillos gustan tanto, que ni Don Diego alcanza a probarlos, pero es en ése capítulo 3 donde supimos que habría romance y muchos de nosotros nos emocionamos cuando vimos a Clara Belmonte dándole órdenes a su patrón para que pudiera tener lista esa preparación que desembocaría en un delicioso ingrediente para los pastelillos, pero no sólo esto, sino también en un romance prohibido para la época, pues las clases sociales no lo permitían.

Además del drama, romance, intriga y pasión, seguro terminaste de ver el capítulo y se te antojó probar esos postres y hasta hace poco, sólo hubiera quedado en tu imaginación, de no haber sido, porque a nosotros también se nos antojó  y logramos recuperar la receta de esta magnífica escena, que existe y está detallada en una página del libro de Fernando J. Múñez y ya fue aplaudida por los fanáticos de la novela en redes sociales. Para que no te quedes con la duda, aquí la receta. 

Ingredientes

• 2 claras de huevo
• Azúcar glass suficiente
• 1 /2 taza de agua de rosas
• 1 taza de agua
• El jugo de 2 limones

¿Cómo se prepara?

1. Se baten dos claras de huevo sin llegar a punto de nieve y se mezclan, removiendo bien y con cuidado.
2. Se agrega el azúcar glass y el jugo de limón cuidadosamente a la mezcla, que debe de quedar ligera. 
3. Aparte, se hace un almíbar con el azúcar, el agua y un poco de agua de rosas. Se revuelve con una cuchara redonda continuamente hasta llegar a medio caramelo. 
4. Se mezclan las dos preparaciones removiendo bien con una espátula de madera y cuando todo empiece a esponjar, se extiende la masa sobre una superficie limpia de forma que ofrezca el aspecto de una lámina no muy gruesa y luego se parte en trocitos. 
5. ¡Sirve y procecho!