¿Estás a dieta? No te quedes con el antojo y prepara unos brownies sin azúcar ni harina

Estar a dieta puede ponernos en una posición incómoda, sobre todo a la hora de los postres. Y es que en la mayoría de regímenes alimenticios, lo primero que nos prohíben son los pastelillos, pero a veces es tan complicado seguir las indicaciones en un día lluvioso, que caemos en la provocación y luego eso nos provoca remordimiento de conciencia, porque esas calorías, que tanto nos costó bajar, las podemos ganar de nuevo en cuestión de minutos. 

Pero todo es más sencillo si partes de la idea de que no puedes quitarlos de tu vida, sino más bien cambiar tus hábitos de consumo. Y esto incluye a los ingredientes con los que preparas tus postres favoritos. La buena noticia es que hoy en día existen más opciones que postres mismos para prepararlos. Ése es el caso de los brownies, uno de nuestros placeres culposos cuando estamos a dieta. 

¡Sí! Los brownies, esos deliciosos pastelillos de chocolate a los que pocas personas podemos resistirnos cuando los vemos en una foto, aparador o nuestra propia mesa, cuando ése alguien que se aparece justo cuando empezamos la dieta, nos lleva uno. Se ven tan pequeños, que nos juegan la mala broma de hacernos creer que por su tamaño no tendrán la horrible cantidad de azúcar, calorías o grasa de la que tanto huimos en lo que perdemos esos kilos. 

¿Dónde surgió el brownie?

Nacieron por equivocación en 1897, cuando un cocinero olvidó añadir levadura a un pastel de chocolate y como resultado obtuvo un bizcocho  sin mucha altura, pero café o marrón (Brownie en inglés), que le dio su nombre. Sin embargo, hoy en día se presentan en forma de cuadros pequeños con una consistencia, que varía en humedad y esponjosidad de acuerdo al gusto del pastelero. Suelen tener una capa crujiente en la parte superior que se rompe deliciosamente al ser cortado para servirse.

Sin embargo, todo placer tiene un precio que pagar y a veces es muy alto en cuestión de salud, pues el consumo excesivo de azúcar, grasa o carbohidratos, puede provocarte un desbalanceo en los niveles de glucosa en la sangre o contribuir para que subas de peso, razones suficientes para que moderes el consumo de estos nutrientes, que el brownie contiene de más. Pero ¿Qué te parecería que pudieras disfrutar de un brownie sin azúcar y sin harina?

Seguramente creerás que esto es imposible, pero te equivocas, porque como acabas de ver, todo depende mucho del cocinero y en este caso eres tú y nos complace decirte que es posible. Sólo tienes que abrirte a las posibilidades y como recompensa tendrás un postre nutritivo y delicioso. En realidad no cambia mucho su sabor, pues se sustituyen estos ingredientes por otros más saludables. ¿Quieres probar? Aquí la receta.

Ingredientes

• 200 gr de chocolate sin azúcar (edulcorado) y sin gluten para fundir
• 200 gr de mantequilla light sin lactosa
• 3 huevos 
• 2 cucharadas de sucralosa / 1 de stevia
• 50 ml de leche de almendras
• 1 cucharada de aceite de oliva o coco
• 1 cucharadita de vainilla
• 70 gr de harina de almendras
• 100 gr de nueces 

¿Cómo se prepara?

1. Añade el chocolate derretido, a temperatura ambiente. Bate de nuevo.
2. Agrega la almendra molida (o harina de almendras). Vuelve a batir.
3. Trocea las nueces y las añade a la masa, mezclando con una espátula. Puedes usar las nueces que más te gusten. 
4. Vierte la masa en un molde cuadrado o rectangular, de silicona o de aluminio si lo quieres llevar a algún sitio. Si usas uno de silicona, engrásalo un poquito antes. Colocamos algunas nueces encima para decorar.
5. Con el horno previamente precalentado, hornea el brownie durante unos 20min a 180º. Depende un poco del horno, puedes estar entre 17 y 23 min, pero cuida no pasarte, porque los brownies se comen jugositos.