Canalés de Bordeaux, un delicioso postre con una receta fácil de hacer

Los canelés de Bordeaux se llaman así porque son unos pequeños panecitos típicos de la ciudad francesa de Burdeos y se caracterizan por su aspecto cilíndrico, con bordes como canaletas, por lo que se le llama así, ya que Canelat viene del gascón y significa "canalón", mientras que su exterior es caramelizado y suave.

De este rico postre hay regularmente tres tamaños y cada uno recibe un nombre distinto, el canelé bouchée que es un bocado, el canelé lunch y el canelé gros o gordo. Los miniaturas son los que se sirven para acompañar el café, como postre de la comida o en cocteles, pero los otros son más típicos de desayunos y meriendas.

Se dice que las creadores de este postre fueron las monjas de la Orden de la Anunciación de la Virgen María a principios del siglo XVI, en Burdeos, quienes utilizaron ingredientes sobrantes para hacer un pan dulce, luego los repartían entre los pobres o los vendían. Más tarde la receta fue rescatada y popularizada por unos pasteleros que lo convirtieron en la especialidad de la ciudad.

Canelés de Bordeaux

Ingredientes:

• 140 gramos de harina
• 1 huevo
• 2 yemas de huevo
• 25 gramos de mantequilla sin sal
• 220 gramos de azúcar
• 500 mL de leche
• 50 mL de ron
• 1 ramita de vainilla
• 1 cucharada de extracto de vainilla
• Azúcar glass

Corta la ramita de la vainilla a lo largo, raspa las semillas del interior y reserva.

En una ollita sirve la leche, el ron, la mantequilla, el extracto y las semillas de la vainilla, pon a fuego medio, remueve hasta que empiece a hervir.

Cuando llegue a su punto de ebullición, retira, tapa y deja infusionar por 25 minutos.

Mientras, en un tazón sirve el huevo, las yemas de huevo y el azúcar, bate hasta conseguir una crema esponjosa color blanquecino.

Agrega poco a poco la harina a la mezcla de los huevos, mientras vas revolviendo, de esta forma evitarás que se hagan grumos. Luego sirve la mezcla de la leche y bate hasta tener una crema suave con una consistencia espesa.

Reserva esta crema en el refrigerador por 24 horas, tapada con plástico autoadherible, deberás remover un par de veces durante ese tiempo.

15 minutos antes de sacar la mezcla del refri, precalienta el horno a 230 grados Centígrados.

Unta mantequilla en los moldes de los canelés y verte la masa en ellos, dejando 1/4 parte para que esponje y no se derrame. Mete los moldes al horno por 5 minutos, luego baja la temperatura a 180 grados Centígrados y deja 50 minutos más.

Retira del horno, deja enfriar sobre una rejilla por 5 minutos, luego desmolda, espera a que tome la temperatura ambiente y espolvorea con azúcar glass, ¡a disfrutar!