Recetas de postres
Nieve de tuna y limón: Prepárala con esta exquisita y sencilla receta
Anímate a disfrutar este delicioso postre que está lleno de nutrientes
El verano ya llegó y nada como disfrutarlo con un delicioso postre frío que nos refresque en esas tardes calurosas. Las hay de limón, de grosella, de piña, de mango y hasta de vainilla; quién no disfruta de una deliciosa nieve, por eso y para que las saborees sin salir de casa tenemos la receta de una exquisita nieve de tuna con limón que te dejará un excelente sabor de boca y no querrás parar de comer.
La tuna, una fruta de la familia de las cactáceas, es un delicioso alimento rico en diversos nutrientes como potasio, magnesio, calcio y fósforo que contribuyen al buen funcionamiento de nuestro cuerpo, a reducir el colesterol y los triglicéridos, prevenir la indigestión y contribuir a la salud de los huesos. De acuerdo con el Fideicomiso de Riesgo Compartido, los nativos mexicanos pueden haber utilizado este alimento desde hace 12 mil años para el tratamiento de heridas y dolencias.
Por su parte, el limón, que siempre da un toque ácidito a los alimentos, es un cítrico rico en fibra, potasio, vitamina C y ácido fólico, que ayuda a la digestión, a prevenir la anemia, reducir el colesterol y proteger el hígado. Anímate a preparar esta deliciosa receta de nieve de tuna con limón que te dejará un excelente sabor de boca.
Nieve de tuna con limón
Ingredientes
- 10 tunas peladas
- Endulzante
- 1/4 de taza de jugo de limón
- Chile en polvo
- Chamoy
Para comenzar, en una licuadora agrega las tunas y un chorrito de agua para que se puedan licuar los ingredientes; muele y, posteriormente, cuela la mezcla para quitar las semillas. Una vez realizado este proceso, en la licuadora agrega la tuna sin semillas, jugo de limón y endulzante al gusto.
En un molde vierte la mezcla y métela al congelador por, aproximadamente, dos horas. Una vez transcurrido el tiempo, saca del congelador y vuelve a moler el helado para evitar que se cristalice. TIP: Puedes removerlo con ayuda de una cuchara si no quieres usar la licuadora.
Finalmente regresa la nieve al congelador y deja que se enfríe durante dos horas más o hasta que obtenga la consistencia de tu preferencia. Chécalo constantemente y remuévelo para evitar que se cristalice. Sírvelo en un vaso con chamoy y chile en polvo para darle un extra de sabor.
