El calor no cede, ni va a ceder. Especialmente cuando el verano está a la vuelta de la esquina. ¡Y vaya que las altas temperaturas han hecho de las suyas!, sobre todo este año, donde se ha registrado una de las sequías más intensas, derivada de la falta de lluvias y de la cada vez más presente escasez de agua. Otro factor importante de todo el calor con el que hemos vivido es sin duda el cambio climático por el calentamiento global.
Sí, lo sabemos. Todo suena cada vez más apocalíptico, pero nos tocó vivir en este tiempo y tenemos que adaptarnos como mejor podamos para disfrutar la vida y pasar bonitos momentos. Suena un poco utópico, dado el panorama mundial. Sin embargo, tampoco es imposible. Hay pequeños gustos que podemos darnos para aprovechar todos los alimentos y además consentir un poco al paladar. Estamos hablando nada más y nada menos que de los postres.
Los postres los podemos elaborar regularmente con lo que tenemos en casa y se recomienda que en caso de las frutas, sea con las más maduritas, porque tienen más azúcar. Sin embargo, hay ingredientes como el chocolate y café, que también puedes aprovechar al máximo elaborando deliciosas recetas dulces para que las consumas después de la comida o hasta de la cena para que tu conciencia con eso interminado que tienes en la despensa, descanse.
Receta que recuerda a la abuelita
Por eso, hoy traemos para ti la receta para que prepares una deliciosa gelatina, pero no como cualquier otra, sino de sabor chocolate, con el que era el favorito de tu abuelita. Sí, ése de tabletas redonditas y gruesas que muchos conocemos y con las que crecimos, casi siempre disueltas en agua o leche para beber un sabroso trago y calmar el frío. La verdad es que Aunque esta no es receta de la abuela, sí tiene ingredientes que sin duda alguna te recordarán a ella y este postre podría colarse entre tus favoritos.
Las gelatinas de chocolate no son muy comunes, pero son absolutamente deliciosas. Si no las has probado nunca, este es tu momento, porque además te sabrá excelente como postre. Es un platillo para compartir y lo más recomendable es que sirvas pequeñas porciones en tu plato, para que disfrutes en la medida correcta y sin temor a subir kilos y kilos de más después de consumir este delicioso postre frío. Así que una vez que se te quitó el miedo: ¡Toma nota!
Ingredientes
- 3 Tazas de Leche descremada
- 2 Tabletas de Chocolate para mesa (90 g c/u)
- 1 Bolsa de Leche Condensada (90 g)
- 3 Sobres de grenetina (7 g c/u) hidratada en 1/4 taza de agua y disuelta a baño María
- 1 Lata de leche condensada
- 1 y 1/2 tazas de leche evaporada
- 1 lata de media crema
- 3 sobres de grenetina (7 g c/u) hidratada en 1/2 taza de agua y disuelta a baño María
- 1 taza de fresas desinfectadas y cortadas a la mitad
- Hojas de Menta fresca desinfectadas

¿Cómo se prepara?
- Calienta en una olla la leche con el chocolate para mesa y la bolsita de condensada y mezcla hasta disolver la tableta de chocolate.
- Agrega 3 sobres de grenetina previamente disuelta e integra.
- Vierte en un molde para gelatina previamente engrasado y refrigera hasta que cuaje.
- Licúa la leche condensada con la leche evaporada, la media crema y con la licuadora encendida agrega 3 sobres de grenetina disuelta.
- Vierte sobre la gelatina de chocolate y refrigera hasta que cuaje.
- Desmolda la gelatina, decora con fresas y hojas de menta.
- Sirve.
¿Con qué la puedes acompañar?
El postre lo puedes acompañar ya sea con un pedazo de pan o con un buen licor de nuez, rompope o hasta un trago de licor de café. Si no tomas alcohol, también puedes comerte la deliciosa gelatina de chocolate con un buen vaso de leche o con una taza de té helado o un buen frappé. Combina con casi cualquier bebida, pero lo ideal es que no te empalagues, así que elige muy bien con qué puedes consumirla.