receta de postres

Aprende a preparar una crema inglesa PERFECTA para tus postres

Sirve como punto de partida de otros dulces o postres tradicionales como las natillas, la crema pastelera o catalana
martes, 11 de mayo de 2021 · 15:05

Cuando hablamos de postres es casi imposible dejar fuera a la crema inglesa, pues de acuerdo con muchos reposteros o cocineras con experiencia, esta es una de las básicas de la pastelería y repostería internacional. Es bastante ligera en su versión más básica, pero se puede sofisticar con otros ingredientes como: vainilla, chocolate, café, licores, frutas, frutos secos, esencias, etc. Es la base de una multitud de helados, mousses y hasta bavarois. 

Incluso sirve como punto de partida de otros dulces o postres tradicionales como las natillas, la crema pastelera y la crema catalana. Como su nombre lo dice, surgió en Inglaterra, como parte fundamental de su tradición pastelera, que desde la Edad Media se abrió paso con los pasteles de carne y tiempo después, la repostería empezó a ganar terreno, de tal suerte que existen famosos postres como el Custard, el Victoria sponge cake, el Trifle y un largo etcétera. 

La crema inglesa normalmente se usa para decorar y acompañar postres de restaurante, generalmente refinados, donde casi no existe un postre que no se acompañe con un poco de esta preparación caliente. Le va bastante bien a los postres que son a base de frutas, pues su dulce equilibra la acidez de estas últimas. Sin embargo, su elaboración es delicada, por lo que se sugiere poner mucha atención cuando se prepare. 

Receta básica

Por eso hoy traemos para ti una receta sencilla, pero deliciosa para que puedas acompañar tus postres con algo absolutamente inglés con lo que podrás tomarte el tradicional té, como Dios manda. Si bien no lleva muchos ingredientes (leche, azúcar y yema de huevo), sí hay que tener mucho cuidado, pues el exceso de calor podría cuajar las yemas de huevo y cortar la crema, estropeando el resultado. Y tampoco querrás mezclar las yemas y el azúcar con mucha antelación, puesto que este último absorbe el agua de las yemas, las seca y puede provocar la aparición de grumos.

Pero no te desanimes. Piensa que además de la pastelería inglesa, también podrías usarla en postres franceses tradicionales, como la crème brûlée  o la base para los helados de leche, como los de vainilla, chocolate o hasta de cajeta. Es una mezcla elemental que más vale que aprendas a preparar de una vez por todas para que poco a poco te vayas convirtiendo en un experto en repostería capaz de dominar cualquier tipo de postre. 

Su textura suele ser cremosa y sin fracturabilidad. Esto último quiere decir que la masa debe de ser estable, consistente, cohesiva y un poco viscosa, que se traduce en "Ni muy sólida, ni muy líquida" para garantizar que le venga bien a cualquier postre que se acompañe con este aderezo dulce, recordemos que es parte importante de pudines, pasteles y mousses. Sin olvidar los pays o natillas como  lo hemos dicho anteriormente. ¡Toma nota! y piensa en qué la puedes verter. 

Ingredientes

  • 1 litro de leche entera
  • 250 gramos de azúcar
  • 8 yemas de huevo a temperatura ambiente

¿Cómo se prepara?

  1. Calienta la leche en una cacerola. Cuando hierva, retira del fuego.
  2. En un recipiente amplio mezclamos el azúcar con las yemas de huevo.
  3. Removemos con unas varillas hasta que la mezcla esté espumosa y el azúcar se haya disuelto. En ese momento añadimos la leche recién hervida y removemos sin parar, pero con suavidad. (Poco a poco para no cuajar las yemas)
  4. Vierte s la mezcla nuevamente en la cacerola, pasando por un colador, y cocemos a fuego medio-bajo.
  5. La temperatura no debe sobrepasar los 85ºC. Durante este tiempo removemos sin parar con una cuchara de madera para evitar que se agarre a la base de la cacerola.
  6. Cuando adquiera espesor suficiente metemos una cuchara y estará lista si forma una fina capa en la cuchara. 
  7. Puedes pasar el dedo por la cuchara para probar la consistencia.  Si el dibujo hecho con el dedo queda limpio, es momento de pasar la crema a un recipiente limpio y dejar que enfríe.