3 postres deliciosos y espectaculares que puedes hacer con cardamomo

El cardamomo es una especia proveniente de la India, la cual suele utilizarse en la gastronomía de diferente países por su aroma, pero también suelen usarla como remedio para diversos malestares físicos, ya que tiene la habilidad de ayudar a contrarrestar y aportar grandes beneficios a la salud gracias a su alto contenido de vitaminas y minerales. El nombre científico que se le da es Elettaria Casdamomun y suele conocerse también como Granado del paraíso. 

Aunque se trata de una especia fuerte, suele ser usada también para diversos y deliciosos postres, en los cuales les ayuda a soltar todos sus sabores de una manera diferente. Te permitirá disfrutar de mejor manera y te aseguramos que percibirás mucho más algunos otros elementos que, probablemente antes, no lo percibías. Sin más que agregar, te dejamos estas 3 recetas para que disfrutes del famoso Cardamomo. 

Galletas de cardamomo y canela 

Ingredientes 

• 100 g Mantequilla sin sal atemperada
• 50 g Azúcar moreno
• 1 Yema de huevo
• 180 g Harina de repostería
• 1 Cardamomo (cucharadita)
• 1 Canela molida (cucharadita)
• 1 Pizca de sal
• 100 g Azúcar glass
• Zumo de limón necesario

Preparación 

Ponemos en una batidora de varillas la mantequilla ablandada con el azúcar moreno y la yema de huevo, hasta que quede una crema pálida. Añadimos la harina, el cardamomo, la canela y la sal, y dejamos hasta conseguir una textura suave. Cuando este lista vamos a tapar la masa con papel film y dejamos enfriar una hora en el refrigerador.

Precalentar el horno a 180ºC.

Tomamos la mitad de la masa y estirarla con ayuda de un rodillo hasta dejar un grosor de, aproximadamente, medio centímetro. Cortamos en círculos con un molde o, en caso de no tener, puedes usar un vaso. 

Llevamos al horno por unos 15-18 minutos o hasta que se hayan dorado.

Sacamos, dejamos enfriar y para el glaseado, tamizamos el azúcar glass y añadimos el zumo de limón poco a poco, mezclando hasta conseguir una textura densa, espesa. Pinta las galletas al gusto y dejar secar totalmente.

Una vez listo puedes disfrutar. 

Arroz con leche y cardamomo 

Ingredientes 

• 1 litro de leche
• 200 g de arroz blanco
• 1 vaina de vainilla
• 4 semillas de cardamomo
• 150 g de azúcar

Preparación

Calentaremos la leche con el azúcar. Cortamos la vaina de vainilla a la mitad, raspamos las semillas y la añadimos a la leche. Quebramos las semillas de cardamomo y las incorporamos. 

Cuando hierva, integramos el arroz. Mueve continuamente para evitar que se queme. Retiramos del fuego cuando el arroz esté cocido y déjalo enfriar tapado para que absorba la leche.

Retira las semillas de cardamomo y sirve.

Natillas de naranja y cardamomo 

Ingredientes

• 600 grs de leche
• 200 grs de Jugo de naranja recién exprimido
• Piel de media naranja
• 4-6 Vainas de cardamomo verde
• 1/2 Vaina de vainilla
• 25 grs de Maizena
• 4 yemas de huevo
• 80 grs de azúcar.

Preparación 

Pondremos en un bowl la leche, reservando medio vaso para disolver la maizena. Lavamos muy bien la piel de la naranja antes de cortarla con un pelador de vegetales para infusionarla en la leche.

Una vez listo incorporamos el jugo de naranja a los demás ingredientes y seguimos mezclando. Añadiremos también las vainas de cardamomo que chafarás con los dedos o golpearás con la mano del mortero para romperlas un poco y que dejen más sabor. Lo ponemos a fuego alto después de eso

Agregamos las yemas de huevo y añadimos azúcar, bate con las varillas hasta que se integre pero sin llegar a espumar. Agremos a la mezcla y seguimos con la cocción. 

Cuando la leche rompa a hervir retírala del fuego, tápala y deja infusionar 5 minutos. Después cuela la leche con jugo de naranja y viértela lentamente y con cuidado sobre la preparación de yemas y azúcar.

Mezcla bien y vuelve a poner todo en la olla. Cuece a fuego lento sin dejar de mover con las varillas o con la cuchara de madera (no debe hervir en ningún momento), hasta que las natillas empiecen a espesar, cuando se enfríen espesarán más.

Pondremos las natillas en moldes de postre y deja enfriar a temperatura ambiente. Una vez que estén frías, puedes taparlas con film transparente antes de guardarlas en el refrigerador por unas horas. 

Cuando notes que están un poco más "duras" será momento de disfrutar.