Las torrijas son un postre de los más tradicional por estas fecha y además resulta muy cotizado, ya que son pocos los negocios que las elaboran, y pocas las casas que se ponen mano a la obra. Algunos conventos católicos, a lo largo y ancho de España, las elaboran y venden de forma inmediata.
Ingredientes:
- 8 bollos de pan de miga bien prieta
- 600 ml de leche
- 200 ml de nata líquida
- 10 cucharadas de azúcar.
- 1 astilla de canela
- 1 trozo de piel de limón
- Una pizca de harina
- Huevos batidos
- Aceite de oliva para freír
- Azúcar moreno
- Canela molida
Elaboración:
En un cazo al fuego, poner la leche, la nata y el azúcar junto con la piel de cítrico y la astilla de canela, poner a fuego suave, hasta que surjan los primeros hervores, retirar del fuego y dejar enfriar.
Mientras tanto, preparar los bollos para el remojo. Con ayuda de un cuchillo, cortarlos a lo lago en dos, de forma que cuando estén en el bazo de leche absorban mucho mejor la preparación y se inflen.
Colocar los bollos en un fuente amplia. A través de un colador, verter la leche y la nata sobre los bollos, y dejar que se empapen por los menos durante 5 minutos, dándoles la vuelta cuidadosamente.
Una vez empapados, manejándolos con cuidado para no romperlos, pasar ligeramente por harina y por el huevo batido. En una sartén con abundante aceite caliente, freírlos despacio, de forma que queden bien tostados.
Escurrir sobre papel absorbente.
Para comerlas, espolvorearlas con azúcar moreno, y si nos gustan más aromatizadas, con un poco de canela molida.