Su refrescante jugo y su belicosa pulpa ha estado presente desde hace más de 25 mil años. Ayudó a los primeros pobladores de América a subsistir, proporcionándoles alimento, medicinas y forrajes para animales silvestres y domesticados, convirtiéndose así en un producto de gran tradición y símbolo a lo largo de la historia de México, pues ha estado presente desde el jeroglífico de la gran Tenochtitlan, hasta la actualidad, esta es la tuna.
Gelatinas, mermeladas, miel, nieves, aguas, salsas y vinagretas son tan sólo algunas de las preparaciones que se pueden elaborar a partir de esta refrescante fruta.
Un estudio del Fideicomiso para la Construcción y Operación de la Central de Abasto de la Ciudad de México menciona que la tuna es una fruta excelente, de sabor exquisito con índice glucémico bajo y contenido nutrimental excepcional por su cantidad de calcio, fósforo, potasio y magnesio.
“Además, esta fruta presenta una concentración significativa de compuestos bioactivos como vitamina C, vitamina E, pigmentos, polifenoles y taurina que en conjunto hacen de esta fruta un alimento funcional”, se resalta en las investigaciones de la Central de Abastos.
A continuación te compartimos una deliciosa receta de nieve de tuna. Se trata de un postre que no vas a poder dejar de disfrutar en esta temporada de calor.
Nieve de tuna
Ingredientes:
- 1 kilo de tuna verde, sin cáscara.
- ½ taza de agua.
- 1 taza de azúcar.
- ½ pieza de limón.
- 3 huevos.
- Hojitas de menta.
Procedimiento
Pasar la tuna por un cernidor para retirar las semillas. Poner al fuego el agua con el azúcar y mantener, sin dejar de remover hasta formar un almíbar. Retirar, dejar enfriar y combinar con la pulpa de la tuna y volver a poner a fuego bajo. Añadir el jugo del limón. Retirar nuevamente del fuego y meter al congelador. Asegurarse que no se congele demasiado. Revolver de vez en cuando con la ayuda de una cuchara, hasta obtener una consistencia granulada. Batir a punto de nieve las claras de huevo, revolver con el granulado, servir en una copa para helado y adornar con unas hojitas de menta.