Postre mexicano
Celebra el Día Internacional del Chocolate con unos ricos tamales de cacao
Este 13 de septiembre celebra el Día Internacional del Chocolate con una receta prehispánica, los tamalesEste 13 de septiembre estamos de festejo, pues celebramos el Día Internacional del Chocolate, y es por ello que en GastroLab te hemos compartido durante toda la semana recetas deliciosas para este día tan especial, así como datos curiosos respecto al chocolate, como que no sólo existe un día mundial, sino hay uno nacional en el que también celebramos al cacao para conmemorar y difundir este producto de tradición milenaria mexicana.
Por ello, en esta ocasión, hemos querido compartir contigo una receta muy tradicional y mexicana, que igual puedes preparar este domingo, en las fiestas patrias o en cualquier otra celebración, ya que resulta un postre delicioso y que puedes compartir en familia: unos tamales de cocoa o chocolate. Como sabes, el chocolate proviene de mezclar masa y manteca de cacao -semilla originaria de Mesoamérica- con otros ingredientes como el azúcar.
El término cacao proviene del náhuatl cacáhuatl que significa "cocoa", nombre con el que nuestros antepasados nombraban al arbusto donde nacía el fruto con el que se preparaba el xocolātl, proveniente del náhuatl y que significa "agua espumosa". Actualmente, es importante consumir chocolate con al menos 70% de cacao para obtener todos sus beneficios, incluyendo un excelente sabor.
Para que estos tamales te queden deliciosos te recomendamos conseguir los ingredientes de la mejor calidad, notarás una diferencia considerable, además, tradicionalmente se piensa que al hacer tamales no debes de estar de malas o pelear, pues se cree que salen "pintos", es decir que no se cuece bien la masa. Sigue los pasos que compartimos en esta receta y verás que tendrás un postre muy mexicano y delicioso para celebrar a nuestro querido chocolate.
Tamales de chocolate
Ingredientes:
250 gramos de mantequilla
250 gramos de harina de arroz
250 gramos de harina de maíz
2 cucharaditas de polvo para hornear
250 gramos de azúcar
50 gramos de cacao en polvo
2 barras de chocolate amargo en trocitos
Hojas de maíz
Fresas y hojas de menta para decorar
Agua
En un recipiente hondo deshaz la mantequilla a temperatura ambiente con tus manos o con una pala de madera, una vez que quede con la consistencia cremosa, agrega el azúcar y sigue mezclando, una vez que se han disuelto los granos del azúcar, añade la harina de arroz, la harina de maíz y el polvo para hornear, sigue mezclando y una vez que se vayan integrando los ingredientes agrega un poco de agua.
Ve añadiendo tanta agua como lo requiera la masa, la consistencia que se busca es de una masa homogénea, suave, manejable, no seca ni dura, pero tampoco aguada. La masa para tamales, regularmente es una masa porosa y untable, una vez que logres esta consistencia añade el cacao en polvo y sigue batiendo, de preferencia con las manos, así oxigenarás la masa para que se esponje, cuando termines, reserva.
Sumerge las hojas limpias de maíz o totomoxtle en una cubeta limpia con bastante agua y deja que se hidraten por unos 10 minutos, luego, escúrrelas bien, toma una y añade una cucharada de la masa de cocoa, extendiendo bien en la hoja, luego coloca un puñito del chocolate amargo picado en trocitos, envuelve bien tu tamal con la misma hoja de maíz y repite hasta terminar la masa.
Coloca a fuego alto tu vaporera con un agua debajo de la rejilla y agrega una moneda, para que en cuanto hierva el agua comience a sonar el metal, agrega unas hojas de maíz al fondo y luego acomoda los tamales de forma vertical, cuando hayas terminado de acomodarlos, coloca otra cama de hojas de maíz y un trapo de cocina, se tapa la vaporera y se deja en fuego alto. Cuando deje de escucharse la moneda se dejan los tamales alrededor de 40 minutos, esto depende de la intensidad del fuego, así que puedes revisar antes o después, según lo consideres.
Para saber si están listos, sólo tienes que abrir un tamal y checar que la masa ya no se pegue en la hoja, además se verá esponjocito. Cuando estén listos, puedes servir y comer calientitos, decora tu plato con unas fresas frescas y unas hojas de menta, así se verá mucho más colorido tu plato.