Prepara un American Cherry Pie digno de una pastelería estadounidense

En las pastelerías de los Estados Unidos tiene un espacio privilegiado el mundo del "Pies", esas tartas rellenas de frutas o de frutos secos envueltos con una crujiente y tibia masa típica de estos pasteles y con un notable sabor a mantequilla. Y dentro de ellos, quizás el de cerezas es el que genera más conexión y fervor entre los apasionados seguidores. Hoy te presentamos, la receta auténtica del American Cherry Pie.

Ingredientes:

406 g Flaky Pie Crust (ver la receta más abajo)

175 de azúcar

24 g maicena

Pizca de sal

567 g de cerezas sin hueso

¼ tsp de extracto de almendras

3 cucharadas de mantequilla

Glaseado:

1 yema de huevo

1 tsp de nata (crema)

Flaky Pie Crust:

128 g de mantequilla sin sal en dados fríos

214 g de harina de pastelería

1/4  cucharadita de sal

1/8 cucharadita de levadura química

60 g de agua fría

7 g de vinagre de sidra.

La masa del pie:

Ponemos la harina , sal, levadura y la mantequilla en un bowl, y amasando lo menos posible, para que no desarrolle el gluten de la harina integramos. Quedará como una especie de arena. Posteriormente agregamos el agua y el vinagre y acabamos de integrar. Envolvemos en un film y dejamos reposar una hora en el refrigerador.

Pasado el tiempo formamos dos bolas: una de 300 g que será la base y otra de 100 que laminaremos y cortaremos con un cortador de pizza tiras. Tomamos molde de poco fondo, para pies, le pasamos un poco de mantequilla para que no se pegue el pie y disponemos la lámina de 300 g de masa.

Con la fruta:

Macerar durante 1 hora las cerezas sobre las que podremos es extracto de almendras, junto la sal, la maicena y el azúcar. posteriormente derretimos la mantequilla en una sartén y salteamos las cerezas hasta que tomen cuerpo, como 10 minutos. Y las disponemos encima de la masa. que ya está colocada sobre el molde.

Tapamos con las diferentes tiras que hemos cortado, disponiendo unas transversalmente y otras horizontalmente, dejando huevo sin cerrar, tratando de crear una especie de rejilla.

Pintamos la masa con el glaseado y ponemos en el horno precalentado a 170 grados durante el tiempo necesario para que se dore bien la masa.