A pocas semanas de que comience en Bacalar el 4º Festival Gastronómico del Caribe Mexicano, una invitada especial destaca no sólo en este evento internacional, sino en la historia de Quintana Roo.
Es la piña miel, una de las pocas frutas privilegiadas con nombre y apellido: Piña o Ananas comosus, esa bromeliácea proveniente de América del Sur, que llegó a ser tan exótica que la clase alta europea del siglo XIX las rentaba para presumir en sus veladas de la clase alta; y miel, por el sabor dulce y fresco que la caracteriza, tanto así que es una de las variedades más populares en el país, a pesar de su efecto escaldador en boca y paladar.
Raíces jóvenes
Quintana Roo cumplió 50 años como estado oficial en octubre pasado; sin embargo, su historia está entrelazada con la piña durante casi cuatro décadas. En 1987, la piña miel llegó al ejido de Pedro A. Santos, en el municipio de Bacalar; fueron dos veracruzanos, Juan Gil y Felipe Lara, quienes trajeron las primeras semillas desde ese estado, en aquel entonces solo existía una variedad local de piña, cultivada únicamente para el autoconsumo.
Fue Felipe Lara, padre del actual comisario ejidal Felipe Lara Bahena, quien tuvo la idea de llevar la producción a otro nivel; con ayuda de los productores jarochos, se propuso sembrar a mayor escala, llevar el fruto a la capital, Chetumal, y presentar la iniciativa al entonces gobernador Pedro Joaquín Coldwell.
Muy pronto la piña se convirtió en el motor del ejido. Las piñas, asomadas como trofeo en lo alto del tallo, se adoptaron muy bien al clima de Bacalar (¿quién no?), y sus habitantes pasaron en cuestión de meses, de venderlas a la orilla de la carretera, a firmar acuerdos de exportación. No es por nada que Pedro A. Santos tiene cariño por esta fruta, pues los puso en el mapa de un estado que tiene fama casi exclusiva de destino turístico.
Números
Quintana Roo cuenta con aproximadamente 400 hectáreas dedicadas al cultivo de piña miel, concentradas en las comunidades de Buenavista y Pedro Antonio Santos, en el municipio de Bacalar. Entre 2011 y 2017, el estado pasó del puesto 23 en producción de piña, con 10 mil 920 toneladas, al quinto lugar nacional con 36 mil 521 toneladas, logrando un incremento del 234% en tan solo seis años, el mayor crecimiento porcentual del país.
Actualmente, México exporta piñas de excelente calidad y sabor a Estados Unidos, Holanda y Alemania. En el caso específico de Quintana Roo, el potencial de la piña es inmenso, ya que las condiciones climáticas y del suelo son ideales para obtener una producción más amplia. Este fruto es uno de los productos con mayor valor en el mercado internacional. México ha incrementado en los últimos 15 años su exportación de piña en un 38.01% y satisface al 100% la demanda nacional.
Así la siembran
La piña miel de Bacalar, en particular de Pedro A. Santos, ya tiene fama de ser la más dulce y ser la que mejor combina con los aliños preferidos del mexicano: chile piquín, salsa picante, una salpicada de sal. ¿El secreto? Además de las bondades de la tierra, también hay disciplina y atención al detalle.
Las semillas de piña, conocidas como clavitos por su forma recta, y los gallitos, pequeños retoños que brotan del tallo, se plantan con precisión y constancia. Cada jornada comienza al amanecer, a las seis de la mañana, y se extiende hasta las tres de la tarde, con la meta inamovible de sembrar mil plantas al día.
Para proteger los frutos y garantizar su calidad, se utiliza un polvo especial que previene los daños causados por mariposas. Este esmero ha hecho que mayoristas de diversas regiones lleguen aquí en busca de las piñas frescas y de excelente calidad, que al mínimo contacto con cuchillo, suelta su jugo amarillento, azucarado, brillante.
La feria
El Cuarto Festival Gastronómico del Caribe Mexicano, se llevará a cabo en el parque General Ángel Remigio Rosado, ubicado en la avenida 5 entre las calles 20 y 22 del centro de Bacalar; los días 08 y 09 de marzo. Además de platillos típicos de la Península, campesinos, agricultores y restauranteros tendrán la oportunidad de ofrecer diferentes platillos preparados con piña miel.