Celebraciones

Adiós 2020, ¡hasta nunca! y, ¿por qué no hay platillos especiales para Año Nuevo?

¿Por qué para celebrar el Año Nuevo no hay platillos especiales, como sucede en Navidad? ¿De dónde viene la costumbre de comer uvas de los deseos? Esto y más, aquí te lo decimos
viernes, 18 de diciembre de 2020 · 02:20

Me parece curioso que no haya una cena tradicional de Fin de Año, así como existe el bacalao y los romeritos en Navidad, no he podido encontrar un símil tan arraigado para la última noche del año.

Hay quien se decanta por sabores tradicionales y caseros, hay quien prefiere reservar los productos de lujo para esta noche, como embutidos y mariscos varios, o hay quien prefiere levantar el teléfono y hacer que su comida llegue preparada, para comodidad del anfitrión.

Lo que sí está claro es que es una cena muy especial y que en cada casa se prepara, o se pide, con esmero y dedicación eligiendo un menú a la altura de las circunstancias y del bolsillo, o simplemente, se elige un paquete de cena baile show que sacan del apuro, normalmente pagando sobreprecios.

Si se logra uno organizar bien, y logra empezar a cenar a una hora decente, probablemente se logre terminar el postre antes que el año. Y así, poder prepararse para toda serie de rituales fantásticos prometedores de años llenos de felicidad, salud y abundancia, que empezaran justo después de las doce.

¿DE DÓNDE VIENEN LAS 12 UVAS?

Como, por ejemplo: La moneda en el zapato para que sea un año de abundancia, barrer la entrada de la casa para ahuyentar las malas vibras, dar la vuelta a la cuadra con una maleta vacía para viajar mucho, ropa interior amarilla para el dinero y roja para el amor, o las 12 uvas para cumplir 12 deseos.

Esta tradición, prácticamente de atragantarse con 12 uvas durante 12 campanadas, viene de España donde dicen hace más de cien años, la burguesía quiso seguir a los franceses que recibían el año tomando champán acompañado de uvas, y se quedaron sólo con las uvas. Aunque también se dice que por aquellas épocas hubo un exceso en la cosecha de uvas, y decidieron vender dicho excedente como “uvas de la suerte”.

Sea cual sea la forma que hayamos elegido vivir nuestros años nuevos hasta la fecha, tengamos en cuenta el año tan difícil para la mayoría, que estamos despidiendo.

Así que hagamos un gran esfuerzo para que las primeras horas del año naciente nos agarren sonriendo, bailando, bebiendo y comiendo nuestras delicias favoritas, con quien nos haya tocado pasar esta noche, y anhelando poder ver a todos aquellos con los que no hemos podido compartir apenas este año.

Y pensemos también en lo que hicimos la nochevieja de 2019, para procurar no repetirlo, no vaya a ser que el 21 se parezca a su antecesor.

 

¡Salud y que el 2021 sea realmente un año próspero!

MENÚ DE CELEBRACIÓN

Para despedir el año se hace una cena muy especial, que en cada casa se prepara con esmero y dedicación.

DESEOS

Después de la cena se hace una serie de rituales prometedores de años llenos de felicidad, salud y abundancia, que empezaran justo después de las doce.

EL ORIGEN

Atragantarse con 12 uvas durante 12 campanadas, viene de España.

EL TIEMPO

La tradición de las uvas dice viene de hace más de cien años, cuando la burguesía quiso seguir a los franceses que recibían el año tomando champán acompañado de uvas y se quedaron sólo con las uvas.

OTRA VERSIÓN

También se dice que por aquellas épocas hubo un exceso en la cosecha de uvas, y decidieron vender dicho excedente como “uvas de la suerte”.

FELICIDAD

Hagamos un gran esfuerzo para que las primeras horas del año naciente nos agarren sonriendo, bailando, bebiendo y comiendo nuestras delicias favoritas.

EVITAR

Analizar lo que hicimos la nochevieja de 2019, para procurar no repetirlo, no vaya a ser que el 21 se parezca a su antecesor.