Esto fue lo que pasó en la segunda edición de la Fiesta de la Vendimia en Querétaro

Entre viñedos y uvas maduras transcurre anualmente, desde hace más de dos décadas, la Fiesta de la Vendimia en  Freixenet, ubicada en Querétaro. Al inicio del mes de agosto la finca se viste de gala para recibir a sus invitados para vivir juntos una gran celebración.

Talleres, catas, pisado de uva, recorridos por la cava, gastronomía y todo lo relacionado a la cultura del vino, son algunos de los eventos que marcaron a esta celebración, cada vez más exitosa, celebración.

“Querétaro es sinónimo de competitividad en todos los rubros: económico, industrial, en seguridad y, por supuesto, en turismo”, afirmó la secretaria de Turismo, Mariela Moran Ocampo, al inaugurar la Fiesta de la Vendimia de Freixenet México.

Destacó que en Querétaro cada vez más viñedos apuestan al enoturismo como una plataforma de desarrollo para la región, hoy reconocida como el Nuevo Napa Valley. 

Dijo que este año habrá 25 fiestas de la vendimia en distintos viñedos del estado en las que se espera la asistencia de más de 350 mil visitantes.

CULTURA DEL VINO

Freixenet México tiene como objetivo divulgar la cultura del vino y la gastronomía. Por ello, a lo largo del año cuenta con talleres programados, como catas de vino con sommeliers invitados, catas de vino con chocolate y taller de puros, entre otros.

Los vinos de Freixenet se distinguen por ser elaborados con el método Champenoise, el cual consiste en hacer la segunda fermentación en botella, con lo que se obtiene un espumoso especial para consentir todos tus sentidos.

Los tres días se ofrecieron conciertos, donde la gente pudo degustar su copa de vino admirando a sus artistas preferidos.

La magia de los viñedos, los paisajes que ofrece el estado de Querétaro, sirvieron como escenario perfecto para la vigésima segunda edición.

Cabe destacar que, también, dentro de esta vendimia participaron más de treinta expositores de gastronomía, queseros del municipio de Ezequiel Montes, Tequisquiapan y Colón, platillos que se maridaron con la gran gama de vinos tranquilos y espumosos elaborados en el corazón de Querétaro, así como otros grandes vinos.

Finalmente, uno de los atractivos de la vendimia que tuvo varias visitas por los asistentes, fue su bodega, que se encuentra a 25 metros de profundidad, que la convierten en la más profunda de Latinoamérica.