Si estás buscando nuevas frutas para disfrutar este calor, el lichi es una joya que no puedes dejar pasar. Aunque no es tan común como otras frutas tropicales, su sabor dulce y floral conquista a quien lo prueba. Su pulpa blanca, jugosa y con un toque exótico, es perfecta para preparar bebidas, postres y hasta ensaladas.
También conocido como litchi o lychee, este fruto originario de Asia se ha ido ganando un lugar especial en los mercados mexicanos. Además de su sabor, tiene muchos beneficios para la salud gracias a su contenido de vitamina C, antioxidantes y agua. Y lo mejor es que puedes disfrutarlo muy fácil, ya sea fresco o en recetas.
Pero si quieres conocer más de esta refrescante fruta, aquí te contamos más sobre el lichi, cómo reconocerlo, por qué deberías incluirlo en tu alimentación, y te compartimos una receta de bebida súper fresca y natural para estos días calurosos. Si nunca lo has probado, esta es tu señal para darle una oportunidad.

¿Qué es el lichi y qué beneficios tiene?
El lichi es una fruta pequeña, redonda u ovalada, con una cáscara rojiza y rugosa que se retira fácilmente con los dedos. Por dentro tiene una pulpa blanca, jugosa y muy aromática, con una semilla grande en el centro que no se come. Tiene un sabor entre uva, fresa y rosa, ideal para quienes aman los sabores suaves y florales.
Este fruto es originario del sur de China y se ha cultivado desde hace siglos. En la actualidad, también se produce en otros países tropicales y subtropicales, como México, en estados como Veracruz o Nayarit. Se consigue durante primavera y verano, cuando alcanza su mejor punto de dulzura.
Entre sus beneficios, destaca que es rico en vitamina C, lo que ayuda a fortalecer el sistema inmune. También contiene antioxidantes, agua, potasio y fibra. Es bajo en calorías y tiene un índice glucémico moderado, por lo que puede incluirse en dietas equilibradas. Además, su sabor lo hace ideal para sustituir bebidas azucaradas con opciones naturales.
Bebida refrescante de lichi y pepino | RECETA
Ingredientes:
- 10 lichis pelados y sin semilla
- ½ pepino pelado
- 1 taza de agua fría
- Jugo de 1 limón
- Hojas de menta al gusto
- Miel o stevia (opcional)
- Hielo al gusto
Preparación:
- Coloca los lichis y el pepino en la licuadora.
- Agrega el agua, el jugo de limón y la miel si deseas un toque más dulce.
- Licúa hasta obtener una mezcla suave.
- Cuela la bebida si lo prefieres sin fibra.
- Sirve en un vaso con hielos y decora con hojas de menta.
Durante la temporada, puedes encontrar lichi fresco en mercados locales, tiendas de frutas exóticas o supermercados grandes. También lo puedes conseguir enlatado, aunque el sabor no es igual al natural y suele venir en almíbar. Lo mejor es consumirlo fresco, justo cuando su cáscara está roja y firme al tacto.