El aguacate es uno de los alimentos más versátiles y nutritivos que existen. Su cremosidad y sabor suave lo convierten en un ingrediente ideal para una gran variedad de platillos, desde guacamole y ensaladas hasta batidos y postres. Además, es una excelente fuente de grasas saludables, fibra, vitaminas y minerales esenciales para el organismo.
Más allá de su uso en recetas tradicionales, el aguacate también puede ser la base de innovadoras preparaciones, como una deliciosa agua fresca. Esta bebida, además de refrescante, aporta una textura única y un sabor delicado que combina perfectamente con ingredientes como miel, leche o vainilla. Si bien puede parecer una combinación poco común, el agua fresca de aguacate es una opción nutritiva y deliciosa que vale la pena probar. Su preparación es sencilla y resulta ideal para quienes buscan una bebida diferente, llena de beneficios para la salud. ¿Quieres saber cómo se prepara? Sigue leyendo.

Cómo preparar agua fresca de aguacate
Ingredientes:
- 1 aguacate maduro
- 1 litro de agua
- 1 taza de leche (opcional, para una textura más cremosa)
- 3 cucharadas de azúcar o miel (ajustar al gusto)
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- Hielo al gusto
Preparación:
- Corta el aguacate por la mitad, retira el hueso y extrae la pulpa.
- En una licuadora, agrega el aguacate, el agua, la leche (si decides usarla), el azúcar o miel y la esencia de vainilla. Licúa todo hasta obtener una mezcla suave y homogénea.
- Cuela la preparación si deseas una textura más ligera.
- Sirve en un vaso con hielo y disfruta de esta refrescante agua fresca.
Esta bebida es ideal para acompañar cualquier comida o como una opción energética a media tarde. Su sabor único y su aporte nutricional la convierten en una alternativa diferente y saludable dentro del mundo de las aguas frescas. ¡Anímate a probarla y sorprende a tus amigos o familia con esta bebida única!