El café es esa bebida que no puede faltar en el desayuno, pues nos ayuda a despertar, acompañar nuestros alimentos e iniciar el día con su sabor reconfortante e intenso. Pero si ya estás cansada del tradicional café negro por la mañana y quieres algo diferente para comenzar tu día, entonces tienes que probar este capuchino cremoso hecho en casa y sin cafetera. Aprende cómo con este paso a paso.
Para preparar un capuchino se suele utilizar leche espumada y caliente. Esto nos da una textura muy cremosa en la taza y un sabor muy especial en cada trago. No obstante, para elaborar esta parte del capuchino se suelen utilizar máquinas especiales, por lo que hacerlo en casa puede resultar un poco difícil. Sin embargo, la técnica del termo que te enseñaremos hoy es muy fácil y requiere apenas unos segundos para estar lista.
En cuanto al café, usualmente se usa un shot de espresso para darle sabor a la leche espumada del capuchino. Este es otro elemento que se suele elaborar con cafeteras profesionales, pero si no tienes este tipo de utensilios a la mano, siempre puedes preparar tu café favorito de forma cargada, agregando una cucharada del mismo en un cuarto de taza de agua caliente. Aunque no es un capuchino tradicional, verás que el resultado de esta bebida es totalmente delicioso y te encantará.
Capuchino rápido
- 1 taza de leche
- 1/4 taza de agua
- 1 cucharada de café soluble
- Azúcar al gusto
Pasos
- Calienta la leche hasta que esté a punto de hervir.
- Coloca la leche caliente en un termo y cierra bien.
- Agita vigorosamente tu termo por un minuto para espumar la leche.
- Sirve la leche espumosa en una taza alta y reserva.
- Prepara el café mezclándolo con el agua muy caliente.
- Vierte esta mezcla directamente en el centro de la espuma de tu leche.
- Endulza al gusto y disfruta tu capuchino.
Es importante que, cuando sirvas la leche en una taza, des unos ligeros golpes sobre la mesa o la superficie donde estás trabajando para que las burbujas grandes de la leche se rompan y esta termine de unificarse en una espuma suave y cremosa. También te recomendamos que prepares esta bebida en un vaso alto o en una taza amplia, ya que, además de la leche, vas a agregar más líquido con el café.
Al servir el café, debes hacerlo rápidamente y en el centro de la leche. Si lo haces bien, se formarán las tradicionales capas del capuchino, donde tendrás leche en la parte baja, café con leche en la parte media y una capa de espuma de leche densa en la parte superior. Al finalizar, solo resta endulzar al gusto con tu edulcorante favorito y disfrutar de un delicioso café espumoso hecho en casa.
