El aloe vera no solo es un excelente producto para la piel; las hojas de esta planta también son comestibles si se utilizan de forma adecuada y pueden traer muchos beneficios a tu cuerpo. Por eso, esta vez te explicaremos para qué puede servirte el jugo de aloe vera y cómo prepararlo en casa fácilmente de forma deliciosa para que así puedas aprovechar todas sus propiedades.
Cuando se trata de jugo de aloe vera, lo que se suele utilizar es la pulpa cristalina de las hojas. Para ello, deberás cortar y retirar toda la parte verde del exterior. Después, enjuaga la pulpa cristalina para eliminar cualquier rastro amargo de la misma. Al limpiar la hoja, es recomendable utilizar elementos de protección adecuados, ya que el aloe vera suele tener espinas que pueden llegar a dañar tu piel. Además, es importante que tu cuchillo esté muy afilado para que puedas cortar este elemento sin problemas.
Como ya te explicamos, el jugo de aloe vera puede aportar grandes beneficios a tu salud. Por ejemplo, puede ayudarte a prevenir el estreñimiento y a perder peso gracias a sus efectos en el sistema digestivo y la actividad metabólica. También puede aportar grandes cantidades de vitaminas y minerales, entre las que se encuentran la vitamina A, C y varias del complejo B, así como el hierro, el zinc, el magnesio y el cobre. Por si fuera poco, puede mejorar la salud de tu piel y disminuir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.