Con el calor que está haciendo, es normal que se nos antoje una bebida fresca, fría y ¿apoco hay mejor opción que una margarita? Si respondiste que no, entonces estás en el lugar indicado, porque la verdad es que hoy queremos compartir contigo una receta para que armes este coctel, pero con mezcal, en lugar de tequila.
La Margarita es uno de los cocteles de origen mexicano, del cual se desconoce con precisión su autor. Sin embargo, tradicionalmente consta de tequila, licor de naranja, jugo de limón o lima y, a menudo, un borde de sal en el vaso. Pero ya a estas alturas de la vida, la realidad es que existen decenas de versiones y variantes.
Y de los creadores de "¿Dónde se inventó la Margarita: En EU o en México?", llega: "¿Qué te gusta más: El tequila o el mezcal?" A lo que probablemente los únicos y diferentes respondemos que este último, porque sabemos que su sabor más fuerte, ayuda a acentuar más el de las frutas o ingredientes con las que se realiza.
Diferencia entre tequila y mezcal
Mientras que el tequila se elabora exclusivamente a partir del agave azul (Agave tequilana Weber), el mezcal puede estar hecho de varios tipos de agave, aunque el agave espadín (Agave angustifolia) es el más común. Sin embargo se pueden usar otros, como el tobala, el tobaziche, el madrecuixe y el arroqueño.
Mezcal en coctelería
Ahora que conoces las diferencias entre el tequila y mezcal, debes saber que este último tiene grandes ventajas en la coctelería, como por ejemplo: su versatilidad, ya que puede usarse en una variedad de cócteles, desde los clásicos hasta creaciones modernas. Esto sucede porque tiene todo tipo de notas: Desde las ahumadas y terrosas hasta las afrutadas y florales.
Ahora que lo sabes todo sobre la margarita y el mezcal, puedes ponerte ¡manos a la obra!