Conoce Douro, el "Duero portugués" que ofrece vinos excepcionales

DOURO, Portugal.- Una de las zonas de vino más conocidas en México es la española Ribera del Duero, llamada así por estar alrededor del famoso río del que recibe su nombre. Este caudal continúa su camino hacia el poniente y al atravesar la frontera con Portugal se le llama Douro.

Justo cerca de la frontera se elevan colinas de hasta 800 metros sobre el nivel del mar que circundan el río y sobre ellas se han erigido viñas que confirman la región de Douro como un espacio en donde se acogen grandes viñedos.

Viñedos, a veces plantados directamente sobre la pendiente de las colinas o en terrazas levantadas por el hombre, dibujan un paisaje sin igual que se disfruta a la vista y posteriormente en el paladar. La mezcla de los suelos de arcilla, la exposición de los viñedos directamente sobre las laderas, el río que en la parte inferior ayuda a que la temperatura no sea muy fría y cepas autóctonas han ido dando fama a esta zona productora principalmente de vinos tintos.

El Duero portugués

Pocas vinícolas, como Quinta do Crasto, se aventuran a desarrollar viñas en terreno tan agreste y difícil de recorrer por sus pendientes pronunciadas, acantilados y dificultad para usar maquinaria. Douro ha tenido un crecimiento más lento que otras zona portuguesas por las limitantes que tiene el relieve del terreno, sin embargo el resultado final en botella ahora es igual o más apreciado que el oporto.

Por cierto, aquí es donde también están los viñedos para hacer este famoso vino fortificado (por la graduación alcohólica más alta que los vinos tradicionales), aunque ahora los vinos tranquilos tintos también sobresalen y tienen fama internacional.

Al igual que en cualquier rincón portugués destacan las cepas autóctonas, como Touriga Nacional y Tinta Roriz (Tempranillo); sin embargo las condiciones y la tecnología usada en la vinificación (acero inoxidable, control por computadora y sistemas por gravedad) resultan en vinos excepcionales.