Bebidas para el verano
Té helado de manzanilla y jengibre: Prueba este refrescante bebida
Las bebidas frescas siempre son un bálsamo para el organismo y si, además, su consumo te aporta grandes beneficios al organismo ¡qué mejor! Por ello, aquí te compartimos esta preparación
No sólo se trata de tomar una bebida por placer, sino de aprovechar todos sus beneficios. A continuación, te explicamos por qué es una rica fuente de nutrientes y, por ello, bien vale la pena que la consumas.
En el texto Infusiones Naturales, se explica que “Desde los tiempos más remotos, los hombres han extraído los beneficios de las flores, las semillas, las hojas frescas o las raíces de muchas plantas, generalmente en forma de infusión. Hoy las infusiones, tisanas y aguas depurativas están más de moda que nunca. Es el momento de redescubrir los remedios de toda la vida”.
Los especialistas en té, tisanas e infusiones recomiendan que para elaborar estas preparaciones se tomen en cuenta ciertos factores. Por ejemplo, elegir plantas, hierbas o flores frescas, lavarlas perfectamente y no dejar por mucho tiempo la preparación en ebullición, ya que esto puede alterar su sabor y valores nutrimentales.
La manzanilla es originaria de Europa y desde siglos se le han atribuido varios valores medicinales. Por ejemplo, es ideal para combatir dolores de estómago, aliviar la tensión nerviosa, problemas de ansiedad, ayuda a conciliar el sueño y combate problemas de digestión.
Por otro lado el jengibre desde tiempos remotos, es considerado una raíz con grandes virtudes en cuanto a medicina natural.
Oswaldo Acuna y Alejandra Torres, del Departamento de Ciencias de los Alimentos y Biotecnología (DECAB), explican que “El jengibre es un rizoma que presenta componentes químicos que aportan beneficios a la salud de quien lo ingiere”.
Sin embargo, combinados a la manzanilla con el jengibre en té helado es un remedio ideal para calmar el colon irritado.
Té helado de manzanilla y jengibre
Ingredientes
- 1 litro de agua
- 3 cucharadas de jengibre fresco, rallado
- 6 cucharadas de flores de manzanilla
- Hielo, al gusto
- Miel, cantidad necesaria
Procedimiento
Hervir una taza de agua con miel. Incorporar el jengibre fresco. Retirar del fuego y dejar reposar por lo menos 10 minutos. Colocar las flores de manzanilla en una jarra y verter el resto del agua, caliente. Revolver durante 5 minutos y esperar que reposen otros 15. Colar el jengibre de la mezcla con miel y combinar con el té de manzanilla. Meter la preparación en el refrigerador hasta que se enfríe. Servir con hielo al gusto
