Bebidas mexicanas
Con esta receta podrás preparar un sublime y delicioso atole de caramelo
Es una bebida fenomenal, que aunque no es la más popular, también puede conquistar a tu paladar
El frío otoñal ya está más que instalado. Sin embargo, lo cierto es que no hay tempestad que no se aguante, cuando podemos soportarla con una bebida que nos encanta y al lado de las personas que más amamos. Las dos cosas no se pueden obtener todos los días, pero si eres una de las personas afortunadas en tenerlas, queremos decirte que no debes dejar ir esa oportunidad, porque uno nunca sabe cuándo se puede acabar o la bebida o cambiar la relación armoniosa con quien compartas tus tardes.
Pero lo bonito de aquellos tragos que te apapachan el paladar, es que caen bien tanto en los buenos, como en los malos momentos. Y una de nuestras consentidas por siempre es sin duda el atole. Sí, una bebida tradicional mexicana que nació en la época prehispánica, que en su forma original es una cocción dulce de maíz en agua, en proporciones tales, que al final de la cocción tendría una moderada viscosidad y que se sirve lo más caliente posible.
El atole es una bebida que sirve de base para el chilate. Sin embargo, es muy común condimentarlo con especias aromáticas, como el cacao, vainilla, canela, anís, azahar y hojas de naranjo, pero también llega a tener otros saborizantes, como chocolate, jugo o pulpa de frutas dulces. También es bastante común que se endulce con piloncillo, azúcar y miel, pero al igual que muchos alimentos prehispánicos, sufrió algunos cambios después de la Conquista.
¿Qué sabores de atoles puedes encontrar en México?
Después de la conquista española empezó a prepararse atole con leche, en lugar de agua, por lo que en la actualidad este es el que podemos encontrar en muchos lugares de México. Los sabores más comunes son: fresa, vainilla, chocolate, guayaba, piña, zarzamora, ciruela, mango, coco, canela, nuez y queso. Sin embargo, la lista es amplia y podemos encontrar hasta de los sabores que menos imaginamos.
En la lista de los atoles con sabor único, se encuentra sin duda, el atole de caramelo, una bebida fenomenal, que aunque no es la más popular, también puede conquistar a tu paladar con su sabor incomparable. Originalmente el atole se elaboraba únicamente a base de la masa de maíz, pero actualmente se prepara con harina de maíz o con fórmulas lista para hacer, a base de sémola de maíz, trigo o arroz.
En un mundo de caramelo, donde todo sepa mejor, este atole lleva adentro canelita y también maíz (Punto extra sin leíste esto cantando 'Un mundo de caramelo' de Danna Paola, porque fue escrito con esa intención). También se elabora con fécula de maíz y todavía no te animas a probarlo, merece todo el beneficio de la duda, porque es el compañero prrrfecto para unos tamales picositos, así que ¡Toma nota!
Ingredientes
- 5 tazas de leche descremada (2%) o alguna otra de tu preferencia
- 1 raja de canela
- 1/2 taza de azúcar
- 4 cucharadas soperas de fécula de maíz
- Un pocillo mediano
¿Cómo se prepara?
- Vacía 4 tazas de leche al pocillo mediano, agrega la canela y pon a fuego medio alto a calentar. Tenla a la vista para que no se derrame.
- Coloca la cacerola sobre fuego medio alto y esparce el azúcar sobre la superficie, déjala ahí por un minuto o hasta que empieces a ver que se empieza a caramelizar.
- Con una cuchara de madera empieza a mover el azúcar. Verás que primero se forman grumos y una que otra "piedra de azúcar". Disuélvelas hasta que se forme un jarabe color ámbar muy claro.
- Tan pronto como se forme el jarabe el caramelo está listo. apaga el fuego rápidamente para que no se queme y toma una taza de la leche caliente y cuidadosamente, vacía la leche sobre el caramelo.
- Verás que el caramelo medio se solidifica al contacto con la leche, no te preocupes, sigue moviendo y se irá disolviendo.
- Cuando el caramelo está completamente disuelto, vacía al resto de la leche que se está calentando.
- Disuelve la fécula de maíz en la otra taza de leche, esta tiene que estar fría, esto es importante.
- Agrega la mezcla a la leche con el caramelo y sin dejar de mover, cuece el atole por cinco minutos. (No dejes de mover para evitar que la leche o el azúcar se pegue al fondo del pocillo).
- Conforme pasan los minutos notarás que el atole tomará una consistencia con más cuerpo y tersa.
- Al pasar los 5 minutos, retira del fuego y deja reposar unos minutos.
- Cuela el atole en otra olla para remover los pedazos de canela.
- Sirve y disfruta.
