Ya te encuentras reuniendo los ingredientes o platillos para la cena más especial del año, saboreas cada uno de ellos y no puedes evitar anhelar que llegue ese día. Sin embargo, una recurrente preocupación llega a tu mente, ¿sentirás la noche de Año Nuevo los padecimientos de la indigestión por disfrutar de todos sus manjares?

En GastroLab queremos que lo único que tengas en la mente ese día, sea el festejo de la culminación de tu año y la ilusión del siguiente; por eso te dejamos 5 infusiones que te ayudarán a prevenir o contrarrestar los efectos adversos de tu cena.

Hinojo

Esta bebida es una excelente aliada del sistema digestivo pues resulta de mucha utilidad en caso de indigestiones o digestiones pesadas. Además, ayuda a desinflamar el vientre y colabora para eliminar los gases, el mal sabor de boca y el mal aliento (halitosis). 

No olvides que en caso de estar sometido a un tratamiento hormonal, medicación con ciprofloxacina o ser sensible a los efectos de los estrógenos esta bebida no es lo ideal para ti pues podrías sufrir efectos adversos.

Prepárala con: 

1 cda de hinojo seco

250 ml de agua

Boldo

Utilizado principalmente para tratar dolencias digestivas gracias a sus propiedades antisépticas, carminativas y analgésicas, además de que evita el estreñimiento y favorece la expulsión de gases. Por otra parte, es recomendable para personas con problemas de cálculos biliares y como un depurante del hígado, gracias a sus alcaloides y sus propiedades diuréticas.

También ayuda a eliminar los líquidos acumulados y las toxinas, por lo que también colabora a combatir infecciones urinarias como la cistitis.

Prepárala con:

2 gr de hojas secas de boldo

250 ml de agua

Hojas de té verde

Este ingrediente se caracteriza por acelerar la producción de pectina, la enzima encargada del proceso digestivo, por lo que no es una sorpresa que esta bebida nos saque de un apuro después de una pesada cena decembrina.

Sumado a esto y de acuerdo con un estudio publicado en el National Library of Medicine esta bebida también puede reducir problemas como la obesidad y afecciones cardiovasculares.

Prepárala con:

1 cucharada pequeña de hojas secas de té verde o 1 bolsa de té verde

1/2 limón

1 cucharada pequeña de miel

Jengibre con limón

Además de reducir el dolor estomacal, también tiene un efecto antiinflamatorio, mientras previene la formación de úlceras estomacales y la acidez; mejora la circulación, por lo que es recomendable para tratar dolores menstruales, migraña y dolores de artritis, sin mencionar que también se considera un afrodisiaco natural, acelera el metabolismo por lo cual es bueno para bajar de peso y protege al sistema inmunológico.

Prepárala con:

2 cdas de jengibre fresco

El jugo de un limón

Miel al gusto

250 ml de agua

Anís

El anís es conocido por ser un antiinflamatorio natural, por lo que es posible tratar padecimientos como la gastritis con una bebida hecha a base del mismo. También puede activar la capacidad de regeneración de las células del estómago y aliviar los molestos gases que se nos acumulan en la zona del abdomen facilitando su expulsión ya sean resultado de la aerofagia o de la fermentación producida en los intestinos. 

Por otro lado, es capaz de hacer algo con respecto a los dolores estomacales que vienen derivados de procesos de diarrea o cólicos intestinales y aunque este beneficio no se produce por una acción astringente del anís, es capaz de hacerlo por su acción al disminuir el peristaltismo en el sistema digestivo.

Prepárala con:

1 cucharada de anís estrellado

4 hojas de laurel

1 cucharadita de manzanilla 

250 ml de agua en una olla