Consejos para preparar un Gin Tonic perfecto con las mejores ginebras

El mundo de la ginebra es amplísimo, y cuando hablamos de elaborar el Gin Tonic perfecto es como decir que existen tantas maneras de alcanzar la perfección como número de Ginebras existentes en el mercado o fuera de él. En este artículo vamos a enseñarte a hacer tu mejor Gin Tonic en cinco pasos y voy a recomendarte las cinco ginebras Premium que están de moda y que la crítica sitúa como las mejores del mundo.

En primer lugar vamos a seleccionar los ingredientes que vamos a necesitar:

La Ginebra de tu elección (más abajo te haré una selección de las mejores).

La Tónica (un mundo a explorar).

El hielo.

Los “condimentos”.

El vaso adecuado: cuerpo ancho y cristal fino (nunca un vaso de tubo).

Vamos a servir el hielo: El hielo lo serviremos de forma abundante seleccionando un tipo de cubito de hielo consistente para garantizar la temperatura del combinado durante el máximo de tiempo. Otro de los detalles del hielo elegido es que deje holgura entre el vaso y éste para poder luego introducir otros elementos que veremos más adelante. Entre un tipo de hielo en cubitos, frappé o fizz, elegiremos el primero, siempre atendiendo a esa máxima de que cuanto más dure mejor.

Girar el vaso sobre sí mismo con el fin de enfriar sus paredes y que el hielo tome su lugar, todo ello para poder facilitar la tarea de condimentación. Si el hielo soltara agua en esta fase, la retiraríamos.

Condimentación: es el momento de elegir el condimento que queremos que lleve nuestro Gin Tonic: una rodaja fina de cítricos (limón o naranja) o pepino, o cualquier otro que elijamos, el cual dispondremos ayudándonos de unas pinzas y lo colocaremos entre las paredes del vaso y el hielo.

Servir la ginebra: intentaremos oxigenar la ginebra vertiéndola desde una cierta altura y en círculo sobre el vaso para que se impregne de la esencia de los aromáticos utilizados en la fase anterior. La cantidad recomendada, es la que pueda satisfacer tu gusto. No hay cantidades fijas, todo depende de tu gusto personal.

Servir la tónica: la tónica recomendada depende de los matices que queramos realzar. Por ejemplo una tónica con mucho gas será ideal si estamos rodeados de un contexto de cítricos por que los mitigará, pero en un contexto diferente es posible que los sabores se realcen con tónicas más livianas en contenido de carbónico. Para servirla nos ayudaremos de la ayuda de una cucharilla rizada para provocar el menor impacto, dejando que se deslice por ella en el interior del combinado.

Disfrutar: sin remover y dejándolo reposar unos segundos tendremos el Gin Tonic deseado.

Te recomendamos esta selección de ginebras que están en boca de todos, posiblemente por ser las mejores del mercado.

-Brockmans, la ginebra precursora de las rosas y que domina el mercado. Es una de la primeras en usar botánicos basados en frutos rojos, que aportan un cuerpo único abriendo el nicho al consumo de mujeres que aprecian sabores tendentes a lo dulce. Condimentos recomendados con esta ginebra: arándanos azules, cáscara de toronja rosa y una buena tónica Premium.

-Martin Miller´s 9 Moons: en este caso estamos ante un ginebra cuyo objetivo de sus creadores es someter a envejecimiento en pequeño barriles de madera de roble francés. Esta técnica junto con ciertos toque de vainilla y coco le dan una magia que no puedes perderte.

-Monkey 47, especial ginebra que reúne nada menos que 47 botánicos haciéndola compleja para saborear con calma. Tiene tres destilaciones y una maceración en recipientes de barro tradicionales. Le va muy bien un toque frutal, herbal o cítrico, como la piel de naranja o de limón, o incluso el romero.

-Mom, elaborada con frutos rojos y exóticos ingredientes botánicos que la hace extremadamente suave pero con gran personalidad. Estos frutos rojos se infusionan  trans cuatro destilaciones en alambiques de cobre, dando como resultado una ginebra con toques a fresas, muy aromática y frutal.

-G´vine elaborada a partir de botánicos de uva verde de tipo Ugni Blanc, versátil y suave y destilada con la propia flor de uva G´vine. Su sabor emerge en los días de floración de los viñedos franceses de la región de Cognac, donde se encuentra esta singular flor durante un breve periodo del mes de junio, en el cual se corta a mano y se macera durante varios días en la ginebra.