¡Deja de sufrir por el frío! Receta para hacer un atole de amaranto delicioso y nutritivo

El amaranto es uno de los cereales mejor conocidos en México, ya que este se utiliza generalmente para la elaboración de las alegrías -barras de amaranto con miel, pasas y cacahuates-, panes, granola, harinas, entre otras. Su consumo está presente en nuestra sociedad desde la época prehispánica, donde era utilizado como parte de los ritos religiosos y era considerado sagrado por su gran resistencia a las temporadas de sequía, incluso era consumido por los guerreros para incrementar su fuerza.

El consumo regular del amaranto en una dieta balanceada logra traer una gran cantidad de beneficios para el cuerpo, ya que contiene entre un 15 y 17% de proteína, aminoácidos, calcio, hierro, fósforo, zinc, ácido fólico, fibra, así como vitaminas A, B1, B2, B3 y C. Su ingesta ayuda a controlar los niveles de glucosa en la sangre, mejora el tránsito intestinal y reduce los niveles de presión arterial. 

Por su gran contenido de hierro, es uno de los alimentos más recomendados para personas con problemas de anemia y desnutrición, mejora el funcionamiento del sistema nervioso por su alto contenido de sodio. E incluso, por años ha sido el perfecto aliado de los tratamientos de belleza tanto para mejorar la apariencia del cabello como para la piel, por lo que podemos encontrarlo en una gran variedad de humectantes, acondicionadores y cremas. 

Si quieres aprovechar todos los beneficios de esta gran semilla, aquí te compartimos la receta del atole de amaranto para que te olvides de estos días de frío y lo disfrutes en casa. 

Atole de amaranto

Ingredientes: 

• 2 2/1 tazas de semillas de amaranto natural
• 2 litros de leche
• 1 raja de canela
• 1 taza de azúcar

Preparación: 

En la licuadora, coloca el amaranto junto medio litro de la leche. Licúa por un par de minutos hasta lograr una mezcla homogénea con ambos ingredientes. Retira y reserva. 

En una olla amplia, coloca el resto de la leche junto con la raja de canela y deja hervir a fuego medio. Una vez que logró el hervor, añade la preparación con amaranto que hiciste previamente en la licuadora. Deja seguir la cocción por 10 minutos más. Recuerda que debes mover de forma constante para que la preparación no se vaya a pegar o a quemar en el fondo de la olla. 

Al final añade el azúcar y revuelve hasta que se disuelva por completo. Comprueba su sabor con mucho cuidado de no quemarte y de ser necesario añade un poco más de azúcar al gusto. Retira del fuego. 

Sirve en tazas o jarros de barro y acompaña con un par de galletas. Si lo deseas, puedes decorar con un poco de canela en polvo. Disfruta de inmediato.